La noche de fiesta en el estadio Monumental tuvo un protagonista especial: Emiliano «Dibu» Martínez, uno de los jugadores más carismáticos y queridos por los hinchas argentinos. Con el 4-1 en el marcador y el partido prácticamente liquidado, el arquero aprovechó para deleitar al público con un gesto que se volvió viral, aunque no todos lo celebraron de la misma manera.
Faltaban ocho minutos para el final cuando el arquero del Aston Villa recibió un pase atrás y, sin apurarse, comenzó a hacer jueguitos con la pelota, provocando la ovación de los más de 85 mil hinchas presentes en el estadio. Sin embargo, no todos disfrutaron la escena: Lionel Scaloni, al notar la acción, reaccionó con un claro gesto de desaprobación desde el banco de suplentes.
Las cámaras de TyC Sports captaron el momento en el que el entrenador hizo señales de «no» con sus manos, mostrando su descontento con la actitud de Martínez. Si bien el arquero no fue sancionado ni generó mayores conflictos, su gesto fue interpretado como una provocación innecesaria en un partido que ya estaba definido.
El entrenador oriundo de Pujato, siempre mesurado, intentó poner paños fríos tras el encuentro. En la conferencia de prensa, minimizó el tema y prefirió centrarse en el rendimiento del equipo. No obstante, su reacción dejó en claro que prefiere evitar ese tipo de actitudes, especialmente en un clásico tan caliente.
Por su parte, el golero campeón del mundo y bicampeón de América, consultado posteriormente en la salida de la cancha por lo ocurrido, sonrió y reconoció que «estuvieron de más».
La Scaloneta se quedó de esta forma con una victoria histórica, sin atenuantes, para seguir escapándose en lo más alto de la tabla de posiciones y seguir reafirmando que es la mejor selección del mundo en la actualidad.
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