A cuatro meses de haber iniciado su nueva presidencia, Donald Trump enfrenta un escenario internacional complejo y una situación doméstica que aún no logra consolidar. Así lo señaló el analista internacional Fernando Pedrosa en diálogo con Canal E, quien resumió la etapa actual del republicano como “más batallas que victorias”.
Un liderazgo que oscila entre la promesa y la realidad
“Trump pasó de prometer y diagnosticar a tener que concretar. Y lo más llamativo es que está intentando cumplir lo que dijo”, expresó Pedrosa. Sin embargo, remarcó que la concreción de sus anuncios de campaña, como resolver el conflicto entre Rusia y Ucrania en 24 horas, ha demostrado ser mucho más difícil de lo previsto.
“Cuando uno se sienta con Putin y él cree que tiene todas las cartas, no hay promesa que valga”, agregó. Según el especialista, el presidente estadounidense empieza a mostrar señales de frustración en su intento de posicionarse como mediador internacional, mientras el conflicto bélico sigue activo y sin solución visible.
Medio Oriente, China y una diplomacia pragmática
Sobre la situación en Medio Oriente, Pedrosa destacó el giro en las posiciones del presidente norteamericano: “Trump amenazó con una lluvia de misiles si no liberaban a los rehenes, pero ahora está negociando con Irán, con los Houthis, y su apoyo a Israel se ha enfriado”.
El viraje responde, en su opinión, a una estrategia pragmática: “Su apuesta parece ser que Arabia Saudita y los países árabes controlen el conflicto y que Israel se adapte”. Estas decisiones han generado críticas internas en Estados Unidos, especialmente desde sectores religiosos y conservadores.
Respecto a su política comercial, Pedrosa consideró que el panorama sigue siendo incierto: “Con China logró algunos acuerdos, pero hay otros frentes abiertos. En el plano internacional, el gobierno sigue en un gran ‘veremos’”.
En el plano interno: tensiones con el Congreso y la justicia
Trump ha tenido algo más de éxito en el terreno doméstico, aunque con dificultades. “Logró aprobar por un voto su ley de reducción de impuestos y subsidios, pero el bloque republicano no votó unido”, explicó Pedrosa, quien calificó ese resultado como “un triunfo pírrico, pero triunfo al fin”.
En paralelo, el mandatario enfrenta obstáculos judiciales, especialmente en materia migratoria, donde muchas de sus iniciativas han sido bloqueadas. “Su principal adversario es la justicia”, afirmó el analista.
Además, señaló que Trump mantiene una postura confrontativa con múltiples actores: “Se pelea con Apple, con las automotrices, con la Reserva Federal, y hasta con Harvard. Ama las batallas”.