La producción de acero crudo se desplomó 4,1 por ciento intermensual en abril y tuvo un leve crecimiento interanual del 0,2 por ciento. Desde la Cámara Argentina del Acero (CAA) consideraron que la recuperación es “más lenta de lo esperado”.
Los datos de la entidad que nuclea al sector registraron que en el cuarto mes del año se despacharon 317.400 toneladas, contra las 330.800 de marzo. «Los niveles de demanda aún se mantienen por debajo de los registrados en 2022 y 2023«, afirmaron desde la CAA.
En el mismo mes analizado, la producción total de laminados terminados en caliente, por su parte, aumentó 16,5 por ciento interanual y 6,5 por ciento contra marzo.
Consumo masivo
Los sectores vinculados al consumo masivo como línea blanca, envases de hojalata y tambores, «enfrentan una creciente competencia de productos importados en condiciones desfavorables, afectando la industria local«, advirtió la cámara y cuestionó la carga impositiva “que continúa presionando a la producción nacional».
El panorama es diferente de acuerdo a los distintos segmentos: “se proyecta un leve repunte en los despachos en los próximos meses, impulsado por la construcción, el agro y el sector energético».
Las expectativas por la cosecha gruesa movilizan a maquinaria e implementos agrícolas y “los despachos hacia regiones asociadas al desarrollo energético se «sostienen en niveles estables, con buenas perspectivas para lo que resta del año”.
La producción de hierro primario fue la que tuvo mayor incidencia negativa: se retrajo 10,4 por ciento interanual en abril.
El mercado local «muestra signos de recuperación, aunque a un ritmo más lento de lo esperado«, concluyó el reporte.