Hoy, en una nueva manifestación violenta por parte del kirchnerismo, una movilización, supuestamente organizada por un «grupo de jubilados» frente al Congreso de la Nación, terminó con destrucción, caos y detenidos, con la participación de terroristas de izquierda, barrabravas y agrupaciones opositoras.
En este contexto, el Frente de Izquierda repartió panfletos con consignas a sus manifestantes de la marcha contra el presidente Javier Milei, ordenándoles «provocar a los policías revoleandoles botellas o piedras» y «una vez que comiencen a reprimir, grabar la respuesta policial«.
El papel, difundido en redes sociales por múltiples usuarios presentes en los lugares de los disturbios, lleva de título «Consignas marcha de jubilados«, e incluye 6 puntos a seguir por los manifestantes:
Las consignas
En primer lugar, se puede leer «Ponerse las camisetas de futbol«. Este requisito responde a la participación de numerosos barras bravas violentos, quien provocaron graves incidentes con la policía.
En segundo lugar, se lee que la manifestación debe «empezar en la vereda y de a poco ir cortando la calle«, con el objetivo de violar las leyes y provocar la respuesta de la policía.
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En este sentido, el tercer punto consta de «provocar a los policias revoleando botellas, piedras o lo que haya al alcance, buscando su reacción«.
Posteriormente, el papel indica: «Una vez que comiencen a reprimir, grabar la respuesta Policial«, una estrategia de «victimización» muy común en la izquierda. Como quinto punto, se indica: «Buscar móviles periodisticos para viralizar la violencia recibida«.
Finalmente, y como forma de operar en contra del Gobierno de Milei mediante noticias falsas, el panfleto de izquierda afirma que los videos grabados se deben «subir a las redes sociales con #TodosConLosJubilados y a los grupos de difusión de compañeros«.
Los ataques de la izquierda
En la «marcha de los jubilados«, los barrabravas kirchneristas, extremadamente violentos, comenzaron a atacar a las Fuerzas Federales con piedras, palos y golpes. La situación se volvió cada vez más violenta, por lo que la Policía lanzó gases lacrimógenos para intentar disuadir a los delincuentes.
Según informaron fuentes oficiales, varios de estos extremistas de izquierda fueron detenidos tras un fuerte enfrentamiento en las inmediaciones del Congreso. La presencia de barrabravas y militantes de grupos kirchneristas y de izquierda intensificó el clima de violencia, generando un escenario de caos en el centro porteño.
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Aunque la marcha fue presentada como una manifestación en reclamo por mejoras en los haberes jubilatorios, la violencia desatada y la organización de los disturbios dejaron en evidencia su trasfondo político.
Con los incidentes, quedó demostrado que el verdadero objetivo de estas acciones es desestabilizar y buscar el derrocamiento del presidente Javier Milei, algo que ha caracterizado a varias protestas de sectores kirchneristas y de izquierda.
La violencia también se extendió a la propiedad pública y privada. Se reportaron vehículos incendiados y saqueados por los manifestantes kirchneristas.
Uno de los hechos más graves fue el ataque a un patrullero de la Policía de la Ciudad, que fue volcado y prendido fuego por los terroristas en la intersección de Avenida de Mayo y la calle Santiago del Estero. Los restos del vehículo quedaron calcinados en medio de la vía pública.
Esta jornada de violencia vuelve a exponer el tipo de «oposición» que enfrenta el Gobierno de Milei, con extremistas de izquierda intentando imponer su agenda mediante acciones violentas y delictivas, desafiando la institucionalidad democrática y la voluntad popular expresada en las urnas.